domingo, 7 de septiembre de 2014

¿Quién se ha llevado mi queso?

RESUMEN.

El cuento tiene 4 personajes, 2 son ratones y los otros 2 son liliputienses quienes viven en un laberinto y cada día al despertar van en busca del queso, así fue por varios días, cada pareja tenia su estrategia para buscar de manera que ya no se confundieran con lugares en los que habían buscado antes.


Un día cada pareja encontró un cuarto en el laberinto donde había mucho queso, los días siguientes ya no fueron de búsqueda, ahora solo se despertaban para ir a donde el queso y comer hasta saciarse, como era de esperarse la cantidad de queso disminuía hasta que un día al llegar al deposito de queso se dieron cuenta que ya no había nada, la manera de actuar de los ratones fue diferente a la de los liliputienses, ya que, los primero al momento de ver que no había queso pusieron en marcha sus patas y fueron en busca de más queso, mientras que los liliputienses se quedaron ahí sorprendidos por lo que les había pasado y lamentándose por lo sucedido.



Después de mucho discutir sobre lo que debían hacer, uno de los liliputienses se canso de la decidía del otro y empezó la búsqueda por sí mismo ya que tenia mucha hambre, encontraba de vez en cuando cantidades mínimas de queso y le llevaba a probar a su compañero pero el no las quería,decía "No creo que me guste ese nuevo Queso. No estoy acostumbrado a él. Yo quiero que me devuelvan mi Queso, y no voy a cambiar de actitud hasta que eso ocurra"


Triste por la actitud de su compañero partió en búsqueda de queso otra vez, camino por el laberinto y después de un intenso recorrido encontró otro deposito de queso, el más grande que jamás hubiera visto, había montañas y montañas de queso, al entrar al depósito se encontró con los 2 ratones que lo recibieron de buena manera y comenzó a comer hasta saciarse.

El liliputiense  y los ratones estaban felices por el cambio que realizaron y también por los resultados derivados de él, mientras que el otro liliputiense se había quedado en el viejo deposito, hambriento y con la esperanza de que alguien le devolviese su queso, su compañero pensó en él y se dijo a sí mismo:
"nadie más que él debía darse cuenta que dejando todas las comodidades y los miedos atrás tenía que salir y avanzar,  nadie podía hacerlo por él, ni convencerlo que lo hiciera. De una manera u otra, tenía que ver por sí mismo las ventajas de cambiar por su bien."

No hay comentarios.:

Publicar un comentario